Barco ebrio

FRIDA RODRÍGUEZ

Los días cálidos en la playa

son sobrevalorados.

Más gloriosa es la dicha

sobre arena fría.

La arena fría relaja; pero la arena fría,

Despierta;

y yo no necesito relajarme,

ya habrá una eternidad para ello.

Yo necesito un golpe,

un chasquido, un trueno

un sueño de simio.

Necesito el sueño de abismo,

el exabrupto,

por miedo a caer de una liana,

sobre arena fría.

A lo lejos, veo algas rojas

y un barco ebrio encallado.

Más lejos, una torre

robando los sueños de un vagabundo

Aquí estoy yo

soñándome torre,

sintiéndome vagabundo,

sin saber que soy un barco ebrio

encallado sobre arena fría.

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Bióloga con 24 años de edad. Se considera amante vívida de la poesía desde hace ya 10 años, siendo principalmente seguidora del trabajo literario de amistades, así como de autorías locales. Ha publicado poemas en varios suplementos culturales de Xalapa, Veracruz y la Ciudad de Puebla. Asimismo, dada su carrera, ha tenido distintas oportunidades de realizar publicaciones en prosa.