MARIANA CISNEROS MIRANDA
Los ojos se transforman, como si ofrecieran un paisaje que solo tú puedes adivinar y desear.
Carlos Fuentes, Aura.
"Es una novela fantástica, pues contiene elementos como el sueño, la brujería, alucinaciones y la búsqueda de la inmortalidad. El concepto de fantasía consiste en que se presenta un evento sobrenatural que interrumpe la cotidianidad. La novela tiene un narrador intradiegético, el cual ayuda al lector a volverse parte de la historia."
Carlos Fuentes es autor de muchos cuentos, novelas y ensayos, inclusive escribió algunos guiones cinematográficos y dramáticos. Es uno de los autores mexicanos más conocidos y distinguidos del siglo XX. Fuentes pertenece al periodo de la narrativa mexicana moderna del siglo XX, conocido como el periodo de los expresionistas ya que hacen uso de las técnicas narrativas novedosas. En 1954 realizó su primera publicación de cuentos, “Los días enmascarados”, un libro que cuenta con 6 relatos y que fue bien recibido por la crítica. A pesar de que su vida consistió en muchos viajes y estancias en el extranjero, nunca perdió la cultura de México.
Aura fue publicado por primera vez en México en 1962, es considerada una de las obras más importantes de Fuentes y una de las mejores narrativas mexicanas del siglo XX. Es una novela corta plagada de elementos sobrenaturales, donde se presenta una fina línea entre la realidad y lo irreal. Fuentes da vida a un ambiente de sombras donde se manifiesta el amor a través de la muerte. Se utiliza el instrumento del sueño para conectar la imaginación con lo tangible, creando intriga y admiración por esta obra mexicana.
Es una novela fantástica, pues contiene elementos como el sueño, la brujería, alucinaciones y la búsqueda de la inmortalidad. El concepto de fantasía consiste en que se presenta un evento sobrenatural que interrumpe la cotidianidad. La novela tiene un narrador intradiegético, el cual ayuda al lector a volverse parte de la historia.
La historia se desarrolla dentro de una casa cuyo interior está en completa oscuridad, con una construcción de estilo gótico. La casa pareciera estar completamente vacía pero ahí vive la Señora Consuelo junto con su sobrina, Aura. El joven Felipe Moreno ve un letrero en el periódico, anunciado un maravilloso empleo, con un excelente sueldo, que requiere talentos como los suyos y decide ir a averiguar de qué trata.
Al llegar a la casa escucha la voz de la señora Consuelo, quien lo guía hasta su habitación. La señora le explica el trabajo, el cual es sencillo, debe terminar las memorias del General Llorente, y la condición es que sea desde ahí, sin abandonar la casa. Moreno acepta y al ver a Aura, la sobrina de la señora, queda cautivado. La tarea encomendada por la señora no le maravilla ni asombra, pero Felipe piensa en la cantidad de dinero que ahorrará.
A la mañana siguiente, Felipe despierta temprano y escucha quejidos; al investigar, descubre gatos encadenados en el techo, peleando y quemándose. Baja a desayunar y, una vez más, Aura es la única persona que se encuentra en el comedor. El joven continúa su trabajo y a la hora de la cena ve a la señora Consuelo en la mesa, lista para compartir esa hora con los jóvenes. Felipe observa los movimientos de las damas y se da cuenta que son completamente sincronizados.
Felipe se acerca cada vez más a Aura y cuando lee más sobre el General, descubre que Aura se parece a la señora Consuelo cuando era joven. Llega a la conclusión de que la anciana retiene a la joven contra su voluntad por lo que idea un plan para llevársela en cuanto termine el trabajo. Una noche Felipe tiene un sueño, una pesadilla donde ve manos descarnadas acercándose con una campana, la campana que Aura usaba para anunciar las comidas en la casa. Hay una voz que grita pidiendo que todos se alejen de ahí y logra observar un rostro con los ojos vacíos. Cuando despierta siente manos que acarician su rostro y su cabello, escucha un murmuro que pide calma y cariño y siente un cuerpo a su lado, desnudo. Reconoce el olor a las plantas del patio, se da cuenta que es Aura. Tienen un encuentro sexual y de la boca de ella salen tres palabras “Eres mi esposo”.
Decidido va a la habitación de la anciana para decirle que se llevará a la joven cuando termine el trabajo. Al entrar ve a la mujer transformada en algo inexplicable. La anciana se encuentra mordiendo una túnica que entre lapsos besa tiernamente y la coloca sobre sus hombros para dirigirse a la cama.
Al día siguiente baja a la cocina, buscando a la joven. Aura se encuentra matando un macho cabrío pero su mirada esta perdida, es como si sus movimientos y voluntad fueran controlados desde otro punto del espacio. Moreno sube a la habitación de la anciana y ve que los movimientos de la mujer simulan estar despellejando un animal. Confundido y en pánico el joven corre a su habitación y se encierra.
En la mañana escucha que alguien sale de la casa, Aura dice que la anciana se ha ido por el día y suben a la habitación de la señora Consuelo. Ahí tienen su segundo encuentro sexual, donde Felipe comienza a sentir extrañezas en el cuerpo de Aura. Al entrar un rayo de luz se da cuenta que es la anciana con quien esta teniendo relaciones, no la joven. Recordando las fotografías del General se da cuenta que Aura y la señora Consuelo son la misma persona; a si mismo, su imagen y la del General son iguales.
La casa de la señora Consuelo es una vieja construcción en el centro de la ciudad de México, cuyos alrededores han sido convertidos en locales comerciales. Las ventanas están tapadas, bloqueando así la luz del sol y dejando la casa en completa oscuridad; la única iluminación es gracias a unas cuantas velas que hay en puntos estratégicos a lo largo de la vivienda. Las paredes huelen a moho y cuenta con un pequeño jardín, donde Aura cultiva sus plantas ‘mágicas’. Se escuchan maullidos de gatos y en los techos éstos corren y se pelean.
La señora Consuelo es una anciana de apariencia demacrada, con cabellos blancos , ojos que pierden su tonalidad verde y piel extremadamente arrugada. Nunca pudo tener hijos pues su esposo era estéril, debido a esto se separan por un tiempo provocando un cambio en Consuelo. Al regresar con su esposo, Consuelo experimenta con lo oculto para recuperar sus años de juventud. Su deseo por recuperar el pasado va ligado a su amor por su esposo y del dolor que experimentó cuando éste murió y su falta de hijos.
Felipe Moreno es un historiador que acepta el trabajo ofrecido por la señora Consuelo por una cantidad ofrecida. Su trabajo consiste en terminar las memorias del General Llorente, difunto esposo de la señora Consuelo. A causa de sus estudios, tiene el perfil que buscaba Consuelo. Su sueño de es ahorrar lo ganado con la señora para así poder terminar su libro y publicarlo. Se enamora de Aura y le pide abandonar a su tía para huir juntos.
Aura es una joven de bellos ojos verdes, esbelta y de piel clara. Siempre está vestida con una falda larga verde. Sus acciones son delicadas y discretas, todo lo que hace es para su tía. Pasa sus mañanas en el jardín, cuidando las plantas. Es el resultado de la experimentación de la señora Consuelo por recuperar sus años mozos y obtener fertilidad para engendrar hijos.
Los sueños y la búsqueda interminable están presentes a lo largo de la novela, creando un ambiente lleno de misterio. El lector queda atrapado en la intriga que genera Aura y su tía hasta llegar a la misma conclusión que Felipe Moreno. El narrador ayuda formar parte de la historia y sentir cómo van sucediendo las cosas, como si le estuvieran pasando a quien lee la novela.
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